miércoles, 23 de abril de 2008

VIAJE SIN RETORNO

En 1992, vine desde Santiago de Chile con mis dos hijos y mis maletas a cuesta a una nueva vida. Estando aún en mi tierra y cuando surge la oportunidad de venir a España, desde el mismo momento en que tuve la certeza que viajábamos a vivir a Madrid, comenzaba para mi y familia la ilusión de vivir en Europa, no piensas en todo lo que vas a dejar, dejas tu trabajo, tus amigos y lo más importante a tu familia, para mi resultaba fácil la decisión, vivía aquí mi hermana, casada con un español, había venido también mi hermano y su hija y lo más importante, mi Madre que pasó sus últimos años de vida entre Chile y España.

Estando aún en Chile, comenzaban los preparativos para venirnos a España, renuncié a mi trabajo de la Empresa Nacional de Aeronáutica, retiré a mis hijos de 9 y 11 años de sus colegios y en cosa de un mes, estaba todo solucionado, mi marido por su parte se quedaría durante seis meses más para vender todas nuestras pertenencias y alquilar nuestra casa.

Así, mientras veníamos con gran ilusión a un viaje -sin retorno- mi marido se quedaba en Chile para dejar todo arreglado y viajar posteriormente a reunirse con nosotros en España.

Recuerdo con nostalgia el día en que mis compañeros de oficina me hacían una gran despedida, dejaba atrás muchos años de mi vida, sacaba a mis hijos de su entorno sin pensar, la verdad es que al ser niños aún, también les ilusionaba el viaje, en fin el gran día había llegado....

Continuará......